Cada canción que no debí escuchar, cada beso que no debió pasar.
Cada frío que debía soportar sin más, cada espera que no debí esperar.
Cada huella de este delirio, que solo se explica como un descuido de Dios.
Cada palabra de tu boca, que no tiene ninguna explicación.Dejaré de pertenecer a tu vida, tal como dejaste pertenecer a la mía.
Y volveremos a ser tan solo
un eterno error del universo.
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